Todo nació por el amor de un hombre por el modelo de ese auto: amor que nació cuando tenía 9 años y que se mantiene hasta hoy
Oscar Pesante, residente de la localidad de Tigre, compró la carcasa de un Fiat 600, la reacondicionó y se lanzó a la aventura.
Pesante, en diálogo con AM750, contó cómo nació su amor por este modelo de autos icónicos en nuestro país: “A los nueve años empecé a trabajar y mi papá tenía un Fiat 600 (…) el me enseñó a manejar con el suyo y luego a los 12 tuve mi primer Fitito, pero como era muy chico no podía manejar. De ahí surgió mi pasión por el Fiat 600”.
Total normalidad en el Delta de Tigre: “Bueno, acá el vecino se va a dar una vuelta en Fitito…” pic.twitter.com/TAsbTztVOl
— Motor1.com Argentina (@Motor1argentina) January 15, 2021
Además, contó que la idea de navegar surgió en pandemia, cuando quedó “varado” en las islas. Le compró la carrocería a un vecino y después “pensó en hacerlo flotar”: “Un amigo que construye botes a pedal me dio un fondo, lo tiré al agua para ver si estaba bien equilibrado y flotó”, dijo y agregó que “después fuí un paso más y le puse un motor”.
Aunque ya no navega las aguas de Delta, sino que la “lancha” ahora es una atracción para los turistas que visitan la zona, Pesante continúa sorprendido por la repercusión que causó su historia.
“El Fitito es como un emblema nuestro. Es un auto de una clase media que estaba creciendo”, sentenció Oscar.
