Septiembre marcó síntomas de activación económica

Septiembre marcó síntomas de activación económica

Septiembre marcó síntomas de activación económica

Según el Centro de Estudios para la Producción (CEP XXI), aumentó la producción de autos, cementos y motos

El Centro de Estudios para la Producción (CEP XXI) informó ayer que la producción de autos, el despacho de cemento y la venta de motos registraron en septiembre un aumento de dos dígitos.

De acuerdo con un informe elaborado por ese centro de estudios, la mejora se extiende a otros indicadores económicos como la recaudación tributaria y una mejora en la venta de autos (0km y usados).

El CEP XXI indicó que la producción de autos creció un 16,1% interanual, alcanzando el volumen mensual más alto desde febrero de 2019, mientras que el despacho de cemento subió un 10,1% interanual y alcanzó el nivel más elevado en 13 meses.

En esa línea, la actividad en las grandes empresas productoras de materiales para la construcción (según el Índice Construya) trepó un 18,5% interanual y la producción de acero crudo recortó su caída al 11,9% interanual (tras contraerse más de 22% en julio agosto).

Además, las ventas de autos 0 km -que habían caído más del 30% interanual en julio y agosto- retrocedieron 3,9%, en tanto que las de autos usados crecieron 4,2% interanual, tras haberse reducido 4,6% en agosto y 11,5% en julio.

Por su parte, las ventas de motos -que también habían estado en terreno negativo en julio y agosto- subieron 48,9% interanual y alcanzaron el mayor valor en 14 meses.

Otro dato que indica una tendencia hacia la recuperación es la recaudación tributaria, que subió 43,7% nominal interanual en septiembre, lo que equivale a un incremento de aproximadamente 4,9% real (la primera alza del año).

En tanto, el índice adelantado de actividad industrial, se estima en base en el consumo de energía provisto por Cammesa, arrojó una expansión del 1,2% interanual para septiembre, lo cual sugiere que la industria estaría operando en niveles cercanos a los de la prepandemia.

Por otro lado, una forma de analizar el impacto sectorial de la Covid-19 es ver qué porcentaje de las empresas de un sector tuvo facturación nula o mínima (esto es, caídas superiores al 90% en términos reales).

Antes de la pandemia, el 6,6% de las empresas del país tuvo contracciones de esta magnitud, en abril, esa cifra llegó al 25,9%, para luego mejorar con el correr de los meses, hasta ubicarse en un 12,7% en agosto.

Los rubros que lograron mejoras marcadas en sus niveles de facturación fueron comercio (con una caída al 23,6% en abril que se redujo al 5,7% en agosto) e industria (que se ubicó en el 29,2% en abril y bajó al 7,8% en agosto).

Los sectores con mayores caídas fueron gastronomía (que cayó al 61,8% en abril y tuvo una recuperación creciente pero aún se encontraba en el 32,8% en agosto) y alojamiento (con una baja al 74,2% en abril que llegó al 64,9% en agosto).

Fuente: Télam.