Leonela Ferreyra: Moverse para sentir, moverse para dar
El viernes anterior nos conocimos, grabamos y nos movimos junto a ella. Aquí, una crónica de nuestra encuentro.
Llegamos a la casa de la cultura, que era el lugar pactado para nuestro encuentro. El día estaba raro, tirando a nublado, pero finalmente a eso de las 5 de la tarde, a lo alto, el sol brillaba. Entramos con un poco de perspicacia porque no había mucho movimiento, y allá en el patio, por un rincón estaba Leonela Ferreyra.
Leo es de La Paz , Entre Ríos, tiene 24 años, y es profe de danza folklórica. Estaba acompañada por una amiga y un perrito (que por la naturalidad con la que se manejaba, parecía de la Casa). Desde lejos dijimos “hola” y caminamos hacia ella.
Ya se la veía estirando, haciendo movimientos de precalentamiento, de un lado al otro. Enseguida pudimos sentir lo que ella llama la “Exploración del mover”. Nos saludamos y presentamos, mientras ella seguía con su rutina de movimientos, como si a cada palabra o expresión le cabía algo más.
Antes de empezar a grabar nos dijo “quiero ser campeona nacional”, y en esa seguridad no estaba solo ella, sino todo Entre Ríos y, en especial, las pibas.
El primer Festival Nacional del Malambo data de 1966 y se lleva a cabo en Laborde, Córdoba solo para varones, y hace 4 años se realiza otro en Carlos Paz que permite que mujeres participen y eso, para Leo, no es solo una oportunidad profesional, sino, también, la posibilidad de transmitir una lucha necesaria, la de que cada vez más espacios estén ocupados por mujeres.
Buscamos el mejor lugar, sobre el fondo había stickers y pegatinas, todas con una impronta cultural. Instalamos el trípode y comenzamos a grabar. Leo no estaba nada nerviosa, y tampoco tenía algo preparado, fue genuina, se dejó llevar, como quién se deja llevar por una melodía anecdótica. Bastaron solo dos tomas para cerrar el video.
Nosotros, en Difundo, ya a dos años de estar presentes en redes sociales, nunca logramos semejante cualidad. Leo está allí, compartiendo con nosotros lo que le gusta, entiende su lugar en la historia, lo acepta y, desde allí, te conmueve. Leo contagia y te convoca a moverte.
Exploración del mover.
El malambo es una danza folklórica típica de Argentina, en la que se puede participar como solista o en grupo y, dentro de los bailes folclóricos, es una excepción porque carece de letra: la música de un bombo legüero y las guitarras acompañan a esta danza.
Seguramente, quienes no la conozcan la pueden referenciar como “en la que se zapatea con mucha energía”, y Leo nos dice: “Siempre hay una vez en la vida que se zapatea”.
Ella tuvo su primer contacto con la danza de chiquita, su madre sufrió un accidente, y frente a ese motivo, la forma de encontrarse y comunicarse era el movimiento.
El próximo festival será entre el 16 y el 21 de noviembre, y Leo está ofreciendo talleres de danza para solventar sus gastos y representar a la provincia de Entre Ríos.
Redacción: Alán Gomez Tutau