La nueva Circunvalación o el Acueducto de Paraná quedaron en jaque por el modelo de ajuste de la era Milei. Son proyectos financiados por Provincia y la Nación
En el medio de un contexto económico y financiero complejo para las arcas del gobierno nacional y las administraciones provinciales, resulta una incógnita poder tener certezas respecto del futuro de la obra pública en Entre Ríos. En Paraná durante los dos últimos años se pusieron en marcha intervenciones estratégicas para dar respuesta a demandas históricas, tales como el déficit en la prestación del servicio de agua potable y la deuda que se tenía en relación a un acceso vial que pudiera mejorar la integración de la capital provincial con el resto de la región.
Ambas cuentan con financiamiento nacional, al igual que la obra de acceso al Parque Industrial, aunque la continuidad de las mismas dependerá de una serie de variables económicas y de la decisión política del gobierno nacional de seguir financiando proyectos, que en algunos casos tenían contratos firmados y hasta un importante grado de avance.
El gobierno provincial, a través del ministerio de Planeamiento e Infraestructura, comenzó a planificar una hoja de ruta para monitorear las obras en ejecución en Paraná, en el marco de un escenario de incertidumbre ante la decisión del presidente Javier Milei de suspender el sistema de obra pública en todo el país.
En una entrevista concedida a UNO, el titular de la cartera de Planeamiento, Darío Schneider, se refirió a las acciones que se están encarando para resolver esta situación y que en el caso de Paraná además incluye obras dentro de la planta urbana vinculadas con desagües pluviales e intervenciones hidráulicas.
Al hacer un primer diagnóstico de la problemática planteó: “La cuestión de la obra pública en Entre Ríos está en una situación crítica, tanto lo que viene con financiamiento nacional, como lo que está previsto con financiamiento del Tesoro provincial. Durante la gestión anterior se generaron muchas obras por toda la provincia, lo cual no está mal, porque todas las obras son necesarias y hacen falta, dado que la provincia necesita infraestructura en todos los aspectos: en materia educativa, en salud y en obras viales. Todas hacen falta y son necesarias, pero con el financiamiento que corresponde y eso es lo que ha pasado: se ha utilizado la obra pública para hacer campaña. Ocurrió durante 2022 y 2023, sin tener el financiamiento para darle continuidad a las obras”.
En este sentido, el funcionario explicó que la reactivación de la obra pública se desvanece ante el modelo de ajuste que defiende la Casa Rosada: “Hay un cambio de paradigma que establece el Gobierno de Milei, de no realizar más obra pública y buscar otras formas de financiamiento. De cualquier manera sobre eso no hay una definición establecida, en el sentido de que más allá que uno pueda decir ‘a partir de hoy no se hace más obra pública financiada con el Tesoro nacional’, hay compromisos asumidos que respecto a esto en la mesa de los gobernadores con el Presidente es lo que se está tratando de resolver”.
A casi un mes de haber asumido en el gabinete de Rogelio Frigerio, el ministro entiende que más allá de la falta de recursos para afrontar la obra pública “hay que darle una solución y darle la continuidad que corresponde. Uno espera que esto se resuelva favorablemente. Hoy está en un impasse, un poco a la espera que estas cuestiones se resuelvan. Es un tema no solamente de Entre Ríos, sino de todo el país y es una tema que está en la agenda de la mesa de los gobernadores con el Presidente”.
Fuente: UNO