El partido de Copa Argentina entre Newell’s y Deportivo Riestra en Paraná terminó en caos luego de que los jugadores de ambos equipos se enfrentaran a golpes en el campo de juego.
A pesar de un desarrollo deportivo que no había sido particularmente tenso, al final del encuentro estallaron los incidentes, opacando el debut histórico del joven Mateo Apolonio, de tan solo 14 años.
Mateo Apolonio, debut histórico en el fútbol argentino, con tan solo 14 años.
El tumulto comenzó poco después del pitido final, cuando jugadores y miembros de los bancos de suplentes de ambos equipos se enzarzaron en una pelea tumultuosa en el campo. Puñetazos, empujones y patadas voladoras fueron moneda corriente mientras el árbitro y sus asistentes intentaban mantener el control, aunque rápidamente la situación se tornó incontrolable.
Las imágenes transmitidas por televisión revelaron momentos de tensión extrema, con jugadores corriendo por el césped en busca de venganza o tratando de separar a los involucrados. En el epicentro del conflicto se encontraban Ignacio Schor, de Newell’s, y miembros del cuerpo técnico de Riestra, aunque los motivos exactos del enfrentamiento aún son objeto de especulación.
El arquero de Newell’s, Lucas Hoyos, fue uno de los que intentó calmar los ánimos, aunque admitió que la situación se volvió inmanejable debido a la gran cantidad de jugadores involucrados. Por su parte, el director técnico de Riestra, Cristian Fabbiani, repudió los disturbios y enfatizó la importancia de mantener la violencia fuera del fútbol.
A pesar del caos, Newell’s logró asegurar su pase a los octavos de final con una victoria por 1-0, gracias al gol de Guillermo May en el primer tiempo. Sin embargo, el triunfo deportivo quedó empañado por los incidentes post-partido, que han generado un debate sobre la seguridad en el fútbol argentino.
Fuente: La Nación
