El gobierno ha confirmado un aumento considerable en las tarifas de gas natural a partir de abril, lo que generará un impacto significativo en los usuarios residenciales de altos ingresos, así como en el sector comercial e industrial. Esta medida, que inicialmente se había previsto para marzo, pero se retrasó para evitar una mayor escalada inflacionaria, se llevará a cabo en tres etapas hasta fin de año.
La decisión de aplicar estos aumentos se fundamenta en la necesidad de trasladar el costo del gas en el Punto de Ingreso al Sistema de Transporte (PIST) – medido en dólares – a los usuarios finales. Esto implica un ajuste de alrededor del 300%, lo que refleja un intento por parte del gobierno de alinear las tarifas con los costos reales de abastecimiento.
Es importante destacar que los aumentos variarán según el nivel de ingresos de los usuarios y la región geográfica en la que se encuentren. Áreas como Capital Federal, el Conurbano bonaerense, La Puna, Neuquén y Paraná experimentarán incrementos significativos en las tarifas de gas.
Además, se ha establecido un mecanismo para mitigar las fluctuaciones bruscas del tipo de cambio en el traslado de los precios del gas a las tarifas. Esto se llevará a cabo mediante el uso de un factor de conversión y la utilización del valor promedio del tipo de cambio vendedor del Banco Nación entre el 1° y el 15° del mes anterior al ajuste de precios.
La medida también busca eliminar un sistema de subsidios que había acumulado un importante déficit y que resultaba insostenible para las cuentas públicas. Se argumenta que mantener un esquema de subsidios generalizados era incompatible con la situación financiera del país, especialmente en un contexto de déficits gemelos (fiscal y externo) equivalentes al 17% del Producto Bruto Interno (PBI).
Se espera que la demanda de gas natural sea significativa en 2024, especialmente durante los meses de invierno, lo que contribuirá a elevar aún más los precios. Esta situación resalta la necesidad de ajustar las tarifas para reflejar los costos reales y garantizar la viabilidad del sector energético en el país.
Fuente: UNO Entre Ríos