La familia de Facundo Castro asegura que el joven estuvo en la comisaría antes de desaparecer
La causa que investiga la desaparición de Facundo Astudillo Castro, el joven de 22 años que fue visto por última vez hace más de 80 días en el sur de la provincia de Buenos Aires, avanzó en las últimas horas con la toma de declaraciones testimoniales y ahora aguardan el resultado del cotejo del ADN de la mamá del chico con los rastros hallados en dos móviles policiales. El jueves 30 de abril pasado, Astudillo Castro caminaba por la ruta 3 desde Pedro Luro a Bahía Blanca cuando fue demorado por la Bonaerense en la localidad de Mayor Buratovich, por violar el aislamiento. Esa es la última pista certera con la que cuentan los investigadores.
La reconstrucción de los hechos que plantea la mamá de Facundo, Cristina, y sus abogados es que Facundo fue detenido a las 10 de mañana por primera vez en la entrada de Buratovich y trasladado a la comisaría. Luego, Facundo habría intentado seguir viaje hacia Bahía Blanca, pero habría sido parado por segunda vez, a las 15.30h, a 5 kilómetros de Buratovich por dos oficiales, cuando iba camino a Teniente Origone, el siguiente pueblo. La policía ocultó no solo el traslado a la subcomisaria sino la segunda detención, que se conoce gracias al testimonio de tres trabajadores esenciales que venían por la ruta el 30 de abril y vieron la situación. El relato de la policía sostiene que, en contraposición a lo que aseguran los testigos, una oficial mujer lo había llevado a Facundo hasta Origone en auto y allí un policía lo habría detenido, pedido los datos y dejado ir.
Las versiones de que Facundo pasó por Origone y siguió camino van en la misma línea que testimonios que aparecieron en la causa los últimos días, de testigos desconocidos y llenos de imprecisiones que sostienen la posibilidad de haber llevado a Facundo hasta Bahía Blanca. Los abogados y Cristina aseguran que son testimonios que apuntan a sacar a Facundo del lugar de los hechos (Mayor Buratovich) y comprometer en su desaparición a personas que no tienen nada que ver como su exnovia, Daiana, que informó haber sido amedrentada por la policía para involucrarla en la desaparición de Facundo o sostener que estaría vivo en Bahía Blanca.
Por estas desviaciones e intenciones de orientar la causa, la familia de Facundo había presentado el día de ayer (21 de julio) un pedido de recusación para separar al fiscal federal que atiende en la misma, Santiago Ulpiano Martínez, justificada en varios motivos. En primer lugar, por sostener que la declaración de la testigo que dice haber llevado a Facundo hasta Bahía Blanca fue “voluntaria” y verosímil cuando fue introducida por la policía sospechada (la información de esta testigo se filtró a un medio con conexiones con la policía y fue publicada en un muro de Facebook antes de ser informada formalmente y que la querella pudiera acceder a ella) y se contradice con el testimonio de los testigos que vieron a Facundo a las 15.30h cerca de Buratovich siendo subido a una camioneta policial blanca y negra. Además, acusan al Fiscal de no promover medidas por su cuenta y las solicitadas por la querella hacerlo de manera insuficiente.
En el fin de semana, tanto el abogado Aparicio como la madre de Castro advirtieron sobre la puesta en marcha de maniobras de encubrimiento de la desaparición de Facundo, e incluso la madre del joven pidió en un video a la ministra de Seguridad Sabina Frederic que si quería cumplir con la «celeridad» que pidió la ONU tenía que relevar a los miembros de la Policía Federal de Bahía Blanca.
Con la intervención de la Procuvin (Procuraduría de Violencia Institucional) y la Delegación de la Federal en Bahía Blanca, también tomó declaraciones a «distintos testigos durante el curso de la semana pasada», de los que se reservó también su identidad.
Además, el letrado añadió «Creemos que lo llevaron a la comisaría pero no lo asentaron, por eso no querían que pasen los perros el 19 de junio, porque legalmente nunca estuvo ahí. Por eso el milico le dice vos acá no tenés que estar, parece increíble pero como los tienen agarrados a esos dos los usaron para seguir encubriendo, en los teléfonos debe estar todo, son tan burdos que no te puede no llamar la atención», explicó al tiempo que afirmó que verificarán esta sospecha con otros datos solicitados.
Durante la semana se informó que «se tomaron cuatro declaraciones testimoniales y se hicieron las pericias en la comisaría de Mayor Buratovich, hubo una confusión porque en un lugar donde había vainas quemadas de Itaka se encontró un cierre muy similar al de la mochila de Facundo marca Wilson pero no era de ese color; y posteriormente se hizo el rastrillaje con canes en la comisaría Federal». A su entender, “hay cinco etapas del encubrimiento que podemos acreditar, 30 de abril, primeros días de junio, 18 de junio, 26 de junio, 13 de julio. Ahora sigue hasta los más altos niveles, esto excede Villarino y lo vamos a demostrar con todas las testimoniales”.
Redacción: DIFUNDO.